Cuetzalan del Progreso, Pue. – Como parte del impulso al desarrollo económico incluyente, fue inaugurada en Puebla la primera Gasolinera Bienestar «Cooperativa Tosepan Moliniaj», un proyecto basado en el cooperativismo y la autogestión comunitaria, administrado por mujeres emprendedoras.
La estación de servicio, la tercera de su tipo a nivel nacional, fue inaugurada por el director de PEMEX, Víctor Rodríguez Padilla, y el coordinador de gabinete estatal, José Luis García Parra, en representación del gobernador Alejandro Armenta.
“Hoy con la inauguración de esta gasolinera se concreta un logro impulsado por la fuerza de las mujeres. Su perseverancia y esfuerzo colectivo marcan el camino para quienes buscan emprender y transformar su realidad”, destacó Rodríguez Padilla.
Un modelo de desarrollo comunitario y soberanía energética
El modelo de Gasolineras Bienestar nació durante la administración de Andrés Manuel López Obrador, con el objetivo de favorecer la economía de comunidades y ejidos locales, permitiendo que las estaciones de servicio sean operadas por los propios pobladores.
La directora general de Alimentación para el Bienestar del Gobierno de México, María Luisa Albores González, resaltó la importancia de este esquema, donde se trabaja en conjunto con los tres niveles de gobierno para fortalecer la economía local.
El proyecto en Cuetzalan recibió una inversión de 23 millones de pesos del Gobierno Federal y busca ser un ejemplo para futuras iniciativas de desarrollo social y energético en el estado.
Beneficios para la región y el sector energético
El presidente municipal de Cuetzalan, Óscar Paula Cruz, subrayó que esta estación de servicio generará empleos y fomentará la competitividad en la región, beneficiando a las comunidades aledañas.
A su vez, el coordinador de gabinete, José Luis García Parra, informó que en los primeros 100 días de gobierno de Alejandro Armenta se ha logrado el decomiso de más de 2.5 millones de litros de combustible robado, un récord histórico en Puebla en materia de seguridad energética.
Este modelo cooperativista no solo fortalece la soberanía energética, sino que también contribuye a la justicia social y el empoderamiento económico de las comunidades más necesitadas.